domingo, 17 de junio de 2007

El contagio me vino a pesar de estar vacunado

Escuchalo Records


¡Vaya un par de meses que llevo! Dos nacimientos de sobrinos acoplados. Visitas a los hospitales. Miradas llenas de amor entre los amantes y padres primerizos. Y me encanta.
Salgo de los hospitales gozando. Con el corazón hinchado. Fijándome en los ojos de los desconocidos que me cruzo, y sonriéndoles con los míos. Lo he recogido arriba y, ahora, por la calle, me tengo que encargar de repartirlo. Porque se da más con los ojos que con ninguna otra parte del cuerpo. Ni manos, ni palabras, ni los genitales, por supuesto, son capaces de comunicar tanto amor como una mirada.
Algunos me responden con cara de susto. Otros, me las devuelven con complicidad, y me sorprende. A lo mejor mi ciudad está llena de locos sonriendo amor, pero no se atreven a correr el riesgo de ser criticados.
Mis amigos comparten su enfermedad conmigo. El contagio me vino a pesar de estar vacunado. Porque he querido, me han querido, quiero y me quieren. Pero a pesar de eso, ha venido una sobredosis de ternura. De bienestar, de honestidad con el mundo, desnudo, enseñando lo que me gusta de mí, y lo que no me gusta.
Y me encuentro con otros, muchos amigos, con los cachorros más crecidos. Y nos miramos, les miramos. Y nos abrazamos sin palabras.
Quiero y no quiero curarme. Noto que estoy en peligro. ¿dónde está el camello de la realidad? Necesito de su química. Una dosis de realidad entre sábanas de algodón y el sol entrando por la ventana. Yo solo no me valgo.


El contagio (Los tigres del norte - Los tigres del norte)

5 comentarios:

Liška dijo...

Entregarse, permitir que se empapen del calor, empaparnos de ellos... de ella, ahí la realidad.

Beber de una melodía de colores...Sentir ;-)

arabesque dijo...

Quizá es que no haya una sola realidad. La hay pasajera, que se hace la encontradiza cruzando un semáforo, o en el kisoco de gran vía. Y hay otra que te sigue a donde vayas, perseverante. Y las dos te empapan, y se equlibran. Y se mezclan dando un color nunca inventado.

Liška dijo...

Tu color... mi color

Un color

;-)

Angie dijo...

La realidad es aquella en la que nosotros creemos, no la que nos dicen que existe..

y es maravilloso bañarse en ella, sintiendo que te acaricia como si fuese una parte de ti..
acompañándote..

Iraultza dijo...

No te cures, habrá días peores y días mejores, pero esa sobredosis de ternura, hace todo mucho más habitable. Para compensar esas épocas en que uno no se aguanta ni a sí mismo.